23 sept 2012

Otoño ekinocial

Hace dos días ekinocio comunicación, mi parte profesional, celebraba su 8 cumpleaños. Sí, Raquel y yo llevamos 8 años con un proyecto lleno de alegrías y de diversión; porque nuestro trabajo nos gusta y sabemos sacarle siempre el lado positivo a todo. A pesar del mal momento que atravesamos las pequeñas empresas y los autónomos, nosotras seguimos pensando en mejorar y ofrecer servicios que permitan evolucionar nuestra capacidad y creatividad. Ojalá podamos celebrar una década "prodigiosa".


















Y para pasar un buen rato con los amig@s y clientes decidimos ofrecer una pequeña merendola llena de dulces ekinociales. Todo resultó rico y apetecible. Gracias Rachel por todos estos años de compañerismo y por su eterno entusiasmo.

Esta fiesta dio paso numeral al otoño. En Compostela se ha cerrado el cielo por unos días y la lluvia es intensa y dolorosa. El viento ofrece sus mejores armas y no deja abrir el paraguas. Ahora sí, el cole ha empezado y los días oscuros también. Esta sensación de frío y malestar corporal puede durar tiempo; así que no queda otra que hacerse a la idea.

Vera y yo sabemos pasar el tiempo en casa. Nos entretenemos con poco y agotamos las ideas. Mejor dosificar que el invierno en Compostela es muuuuyyyy largo. Después de unos meses coleccionando y guardando los cartones del papel higiénico, decidimos copiar una idea que vimos en un blog genial que se llama ohmanualidades.com. El resultado no es igual pero bueno...Trabajar con Vera significa "terminar pronto".


















También recogimos ramas caídas de los árboles cercanos a casa y, reciclando una botella de cristal que contenía un rico zumo de melocotón, decidimos preparar un florero. No está del todo acabado porque tenemos que comprar lana de color rojo y forrar algunas de las ramas que se quedaron vacías. La lámina enmarcada es de Vera. La dibujó el año pasado con acuarelas. A que es preciosa?


















También nos dedicamos a la "cocina creativa". Si es que cuando las comidas son normalillas, mejor darles un toque diferente y ofrecer un plato decorado con simpatía. Y este fue uno de esos que le preparé a Vera para que se echase unas risas mientas lo degustaba. Es que el arroz blanco con salchichas es su perdición... A menudo le pongo mensajes con una banderilla dibujada. Y le hace mucha coña.


















Uno de los últimos días del verano fuimos con los yeyos a Sada, para estar con el primo Mateo, la tía María y el tío Carlos. Lo pasamos muy bien en casa y después salimos a dar un paseo cerca del mar. Paramos en el parque para merendar y pronto tuvimos que regresar a casa por culpa del fuerte aire que se levantó. De camino, un solitario carrusel de cochecitos incitó a yeya a pagar un par de viajes a los nietos. Y allá que se subieron en el coche de ferrari... Menudos dos!! Lo que disfrutan juntos!!


















El 1 de septiembre se casó Rosiña, una gran amiga de la facultad con quien compartí muchas risas y confidencias. Cedeira es un lugar costero precioso; pena no estar más tiempo para conocerlo mejor. Lo pasamos genial y recordé buenos momentos junto a Rocío, Raquel y Ana Belén. Nos presentamos más de 150 personas y entre los asistentes a la ceremonia, encontré a unas señoras mayores que no querían perderse el evento del pueblo. Todo es importante...