Esta tarde, para hacer un poco de tiempo antes del baño de Vera, se me ocurrió buscar en Internet la receta de las tortitas que tanto le gustan a Pol. Encontré una muy fácil (la verdad es que no tiene ciencia): 1 huevo, 4 cucharaditas de azúcar, medio vaso de leche, 1 vaso de harina y 2 cucharaditas de levadura. Se bate todo bien hasta conseguir una masa homogénea. Pones una sartén al fuego y en cuanto esté caliente (sin aceite) echas un poco de la masa. A mi me han salido 4 buenas toritas... A ver qué os parece...
Creo que no han quedado mal. El sabor era rico también pero a mi no me gustan tanto estos postres tan, tan, blandochis. A Pablo le han encantado. Vamos! Que ya no queda ninguna y las calorías que se ha metido para el cuerpo no son pocas, eh? Bueno, es una manera de hacer cosillas con mi nena; entretenernos juntas y ayudarnos en la cocina. Es una gran ayudante y seguro que cuando sea mayor le gustará estar entre cacerolas y sartenes.
Hasta la próxima.