22 nov 2011

Santiago, un lugar...

Llevo 7 años de mi vida, estos últimos, en esta preciosa ciudad sin mar. Soy de secano de nacimiento y siempre he añorado esa sensación... Pero los más de 20 años que viví en Vilagarcía hacen que tenga el mar siempre presente. Al lado de casa, como se dice. Tener playa a 3 kilómetros es un lujo que he apreciado bien poco y he de reconocer que ese paisaje es espectacular.


















Algo parecido me pasa con Santiago. Un lugar para disfrutar también, aunque de otra manera y con otros sentimientos. He echado raíces en este sitio y he crecido como persona. He sido madre y he montado mi empresa de diseño y comunicación con una compañía maravillosa. He creado una familia a nivel personal y profesional.


















He aprendido a ser paciente (las cosas llegan cuando tienen que llegar), a llevar un ritmo de vida inquieto pero bien aprovechado. Y sobre todo, he aprendido a contemplar, a observar, a matizar todo lo que veo... He dejado muchos miedos atrás (otros tengo en mente ahora) y sigo mirando hacia delante. Marcando el paso y conociendo a fondo todo lo que toco. Hay rincones que no me dejan indiferente. Siempre que salgo a la calle a tomarme un respiro encuentro algo nuevo que me sorprende. Y eso me gusta!

11 nov 2011

Letras: fase previa

Hace dos fines de semana se me ocurrió hacer un experimento con mi hija y con varios cartones reciclados que voy almacenando para nuestras manualidades. Quería hacer unas letras corpóreas para decorar la habitación y ver hasta qué punto Vera se involucraba en el trabajo manual. Como era de esperar, nos pasamos una tarde entera haciendo todo paso por paso: imprimiendo las plantillas de las letras tamaño A4 aproximadamente, recortando las bases de las letras, pegando y doblando cartones, colocando celo y cinta de carrocero por todos los lados... Y pegando papel de periódicos alrededor de todas las letras para hacerlas más consistentes. Así quedaron las letras en su primera fase de realización.


















Cuando vimos las cuatro grandes letras juntas, nos miramos y dijimos... Mejor las pintamos de colores! Ahora necesitamos tener otra tarde entera (espero que no pase mucho tiempo entre una fase y otra) para terminar el trabajo, enfundar las letras con vendas de escayola y dejarlas preparadas para que la imaginación de una y de otra sea la protagonista definitiva del experimento. Y entonces os enseñaré el resultado final. Yo ya puedo imaginármelo, y vosotros?

3 nov 2011

Primera tarjeta de visita

Como ya sabéis, a mi nena le encanta dibujar y pintar y colorear sus cosillas. Hace dos días me sorprendió con este dibujo en un cartón que ella había recortado previamente. Visualizó en él su primera tarjeta de visita. Me haría mucha ilusión que tuviese el mismo entusiasmo que tengo yo con mi trabajo. Ya os contaré cuando sea mayor...




































Ya ella busca sus formatos y sus colores para representar algo. Y todo me parece precioso! Tengo tres carpetas completitas de dibujos y expresiones varias que seguro tendrán un buen lugar en algún rincón de la casa (algún día). Me encanta ver cómo disfruta creando e imaginando lo que pinta: una casa, un dinosaurio, un árbol con manzanas, mamá jugando al baloncesto...

Su obra se merece un post especial así que iré preparando el material para mostraros algunas de sus ideas, vale?